Enlazando con nuestro artículo del mes anterior, seguimos exponiendo las conclusiones a las que se llegaron en la Mesa sobre la ‘Radiografía de las energías renovables en España’ que se reunió a mediados de noviembre.

En esta ocasión, vamos a centrarnos en la necesidad de que desaparezca la inestabilidad regulatoria para conseguir más y mejores inversiones en renovables en España, con el fin de acometer los cambios que describíamos en la primera parte del artículo: la digitalización y fortalecimiento de la red eléctrica, así como el encontrar soluciones viables a la demanda de almacenamiento de la energía que se genere.

Los participantes en la Mesa señalaron que la normativa fiscal es, hoy por hoy, el factor más rígido que poseemos y que se debe modificar. Es importante empezar a sancionar y recompensar además de dejar de temer a las mejoras y actualizaciones en temas fiscales. Para conseguirlo, se propuso el planteamiento de diversos escenarios fiscales con los que hacer pruebas y ensayos.

En este mismo sentido, se requirió “rectitud” y “ortodoxia” en todos los temas relacionados con la fiscalidad del medio ambiente ya que es la base para impulsar el cambio, sin pretender hacerlo solo para aliarse con otras naciones europeas.

Esta transformación no será factible salvo que se establezca una normativa clara. La estrategia gubernamental en el sector energético constituye el eje vertebral del ámbito industrial, el I+D, las finanzas y el crecimiento de los intercambios comerciales.

También se nombró a la CNMC sobre la que recae actualmente la responsabilidad de aceptar los métodos y circunstancias válidas para el acceso y la conexión a la red eléctrica ya que “sin acceso no hay paraíso”. Es esencial que desempeñe un rol notablemente simplificador.

Por otro lado, también puso sobre la mesa la intervención tan importante que ha venido realizando la Unión Europea en la normativa energética española, lo que mediatiza tremendamente la postura de la Comisión y de la Administración.

La Asociación Eólica Española, presente en la mesa, pidió la existencia de acuerdos perdurables, lo que requiere que todos colaboren para conseguirlos: “Aunque los calendarios de legislatura son de cuatro años, los de inversión no lo son”.

El reto de estimular la economía española

Es evidente que, si se consiguieran alcanzar todos estos acuerdos y aumentaran las inversiones, se lograría la dinamización del mercado español. La transformación de la economía encaminándose hacia el uso, cada vez mayor, de electricidad procedente de fuentes renovables implica una gran ocasión de desarrollar la economía e industria españolas.

Por ello, no solo es conveniente intervenir a la hora de decidir estrategias europeas, sino que también es necesario tomarlas a nivel de nuestra nación. Se debe determinar si deseamos ser simples actores de reparto o los personajes principales de la obra, si deseamos ser únicamente instaladores o, por el contrario, productores.

En un breve espacio de tiempo, es importante que se genere confianza en las renovables creando puestos de trabajo, un mayor nivel de vida y de bienestar. Para lograrlo, es fundamental que el marco normativo que afecta a investigadores, pymes y grandes empresas, sea estable y que se actúe en base a él.

Los responsables del Centro Nacional de Energías Renovables (Cener) pusieron de manifiesto la existencia de dos espacios de tiempo:

• Hasta 2.030: Donde la normativa ya está concretada
• De 2.030 a 2.050: Periodo para el aún hay que establecer los fundamentos y tener margen para realizar una programación de cara al futuro.

Para esta segunda etapa habría que abordar temas como la forma de regular el sistema, el desarrollo de soluciones de almacenaje de la energía que aún no existen, la creación de tecnologías novedosas que permitan lograr metas más altas…

También se hizo referencia al “prosumidor”, término formado por la unión de las palabras “productor” y “consumidor”, ya que no se sabe qué rol va a desempeñar en esa futura etapa.

Para concluir se subrayó la excelente situación de base en la que se encuentran las energías renovables, lo que supondría un auténtico absurdo si no se beneficiaran de ella para desarrollar y evolucionar el sector, dentro de un marco regulatorio estable.

Desde Coagener, como empresa experta en energía renovable fotovoltaica, nos unimos a esta justa demanda del sector.